Es en este contexto disminuyen los montos de los
subsidios UBACyT y la proporción de dedicaciones exclusivas sobre la totalidad
de cargos docentes, lo cual consolida la desarticulación de las condiciones
necesarias para el desarrollo de la investigación universitaria autónoma.
Asimismo, los “estipendios” de los becarios de investigación de la UBA en los
últimos años han sido actualizados sistemáticamente por debajo de la inflación
(el 25% anunciado hace pocos días es menor al alcanzado por cualquier gremio en
2014), y se les han negado asignaciones familiares, aportes jubilatorios,
aguinaldo y otros derechos laborales.
Los regímenes de dedicación exclusiva de estas becas
agravan severamente las condiciones de trabajo. En el caso de los becarios de
grado (“estímulo”), si bien se explicita que deben dedicarle a la investigación
10 horas de trabajo semanales por un monto de $2000, no se les permite llevar
adelante otros trabajos. En otras palabras, la UBA promueve que los estudiantes
becados deban recurrir a fuentes de trabajo no registrado para subsistir, o
bien ser sostenidos económicamente por sus familias. En el caso de los becarios
de posgrado (de maestría y doctorado), además de sus tareas de investigación
deben cumplir con el requisito obligatorio de desempeñarse como docentes en la
Universidad. No obstante, en gran parte de los casos se trata de cargos ad honorem, mientras que en facultades
como Filosofía y Letras, bajo la figura de “asignación de funciones” no sólo
ejercen la docencia de forma gratuita sino que ni siquiera reciben un
nombramiento, por lo cual no contarán con antigüedad ante una eventual renta en
el futuro.
A su vez, es importante destacar que los aumentos anuales
de los estipendios de todos los becarios no están atados a las subas salariales
de los docentes, sino más bien a las discrecionalidades del Rectorado.
Recordemos que en el pasado reciente las becas no sólo eran equivalentes al
salario de un Jefe de Trabajos Prácticos con dedicación exclusiva sino que
garantizaban el derecho a concursar por dicho cargo una vez finalizada la beca,
fortaleciéndose así la articulación entre la investigación y la docencia.
Finalmente, vale la pena aclarar que si bien muchas de
las carencias de los becarios de la UBA son características de los de otras
instituciones, en algunos casos sí se ha avanzado en puntos como licencias por
maternidad y obra social (como en el CONICET). Asimismo, es común ver en un mismo
instituto o laboratorio a dos becarios (uno de la UBA y otro del CONICET)
realizar las mismas tareas con distintos ingresos (siendo ambos insuficientes).
De este modo, el becario UBA atraviesa una situación agravada respecto del resto
de los becarios del sistema de Ciencia y Técnica.
Desde Docentes por el Cambio defendemos un
modelo de universidad en el que la investigación sea un pilar tan importante
como la docencia –con la que se debe encontrar articulada– y en el que el
acceso a ambas sea un derecho consagrado para todos/as los/as trabajadores/as. Consideramos
que constituiría un avance en este sentido la gratuidad de los posgrados de la
Universidad de Buenos Aires para todos sus docentes. Impugnamos, por el
contrario, el modelo científico y tecnológico que pretende convertir a las
universidades en meros “enseñaderos” y/o en instrumentos para el desarrollo de
productos orientados al beneficio privado.
Por
los motivos enumerados, consideramos que, como gremio, no sólo debemos
participar en todas las instancias de reclamo sobre las condiciones laborales
de los becarios UBA sino también instalar entre los docentes el debate acerca de
los proyectos de universidad en danza. Debemos fortalecer la articulación con
los otros trabajadores de la ciencia y la tecnología, pero sin perder de vista
la especificidad que nos delimita. Así, además de promover y apoyar sus luchas
tal como lo venimos haciendo, debemos orientar nuestra política gremial a
denunciar y frenar el desarrollo de instrumentos que desde la política
científica apuntan a esconder el desfinanciamiento educativo y a incidir en el perfil
de los docentes e investigadores de la Universidad.
Por lo tanto, convocamos a los
becarios y a los docentes que hoy no pueden acceder a la formación doctoral ni
a los subsidios para la investigación a discutir este escenario este lunes 25 de agosto a las 18:30 hs en
la sala de profesores de la Facultad de Filosofía y Letras (Puan 480).