miércoles, 15 de febrero de 2012

Por una verdadera democratización del sistema científico y tecnológico.

En los últimos meses, estudiantes de posgrado y doctores de las distintas universidades de nuestro país han comenzado a articular un reclamo que si bien había estado presente desde el 2003 (antes también, pero con un carácter diferente), cobró especial fuerza como consecuencia de la publicación del resultado del proceso de evaluación de los pedidos de ingreso a la carrera de investigador científico (CIC) y becas de posgrado y posdoctorales. En dicha publicación se efectivizó que a pesar de la recomendación positiva por parte de sus respectivas comisiones evaluadoras una gran cantidad de aspirantes no será integrada al sistema científico. Para el caso de Posdoctorado y CIC, el Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva (MINCyT), responsable de las políticas que CONICET lleva a la práctica, tomó la determinación de no absorber a todos los graduados que han usufructuado una beca doctoral. La directriz es: no hay lugar para todos, sino para “los mejores” y/o “los más necesarios”, lo que es definido unilateralmente por el organismo y sin dar continuidad a los criterios temáticos/regionales que habían sido utilizados para otorgar las becas de posgrado a esos mismos doctores.

Desde Docentes por el Cambio entendemos que la docencia y la investigación están articuladas y que no pueden ni deben ser escindidas en las distintas instancias. Creemos que la precariedad laboral que afecta a los docentes universitarios ad honorem y a los becarios conduce a la negación de su carácter de trabajadores, y que no habrá soluciones reales hasta que no se les reconozcan sus derechos en tanto tales. Asimismo, consideramos que la escisión de la docencia y la investigación, junto con la aplicación de lógicas individualistas, competitivas y meritocráticas que subyacen a los procesos de selección, niega el carácter colectivo de la construcción del conocimiento y la cooperación para su desarrollo. También niegan el carácter colectivo la falta de transparencia y la falta de participación social en la definición de las políticas científicas y tecnológicas: hoy existe una política definida a puertas cerradas y orientada explícitamente hacia un sistema estatal que esté al servicio de transferir conocimiento, personal capacitado y tecnología a manos privadas; el pretexto es que eso redundará en un beneficio social general. Consideramos, por el contrario, que una verdadera apropiación social del conocimiento sólo es posible a condición de la democratización de la política científica y tecnológica, lo que supone la integración del conjunto de la sociedad en su definición.

Por lo anterior, convocamos a docentes y estudiantes a acompañar a becarios, docentes e investigadores en sus reclamos y a integrarse en la lucha por un proceso de democratización del sistema científico y tecnológico. La próxima acción es la concentración del miércoles 15 de febrero a partir de las 8.30 en la sede central CONICET (Av. Rivadavia 1917), cuya convocatoria pegamos abajo.


Docentes por el Cambio